La contabilidad siempre se refiere a una persona determinada (Física o Jurídica) que lo denomina ENTE. Se usa este término para denominar a las unidades económicas (con fin de lucro o no) en las cuales sus propietarios (o su dueño) destina bienes con un fin determinado (obtener beneficios o prestar servicios a sus propietarios). El ente es una “persona” diferente de su dueño o de sus propietarios (en el caso de una sociedad) La actividad del Ente puede ser muy variada, cualquier actividad lícita puede ser OBJETO del Ente. El Objeto puede ser Industrial, Comercial, de servicios o alguna combinación de estos. Este objeto del Ente será el medio por el cual su dueño o propietarios intentaran cumplir su objetivo (obtener una renta o prestar servicios a sus asociados) Por ello decimos que un Ente puede ser con fin de lucro, intentará obtener una rentabilidad, o sin fin de lucro. En este caso, su fin es prestar algún servicio a sus propietarios o asociados (cooperativas, asociaciones deportivas, etc.) aunque pueden tener ganancias que reinvertirán para lograr o mejorar su objetivo. Para lograr su objetivo, se deberá valer de Bienes (materiales e inmateriales) que serán aportados por su dueño o propietarios y después podrá comprar, producir o ser solo usuario. El valor económico (cuantificable) de estos bienes son de los que se vale la contabilidad y formarán el PATRIMONIO.
Patrimonio
El patrimonio del ente es la sumatoria de los bienes y créditos reconocidos. Contablemente hablamos de Patrimonio NETO, detrayendo de los bienes y créditos las deudas y obligaciones (incluyendo las contingencias cuantificables). Para ello utiliza procedimientos para informar a propietarios y terceros interesados, la composición y la valuación del mismo con el fin de que sean la base para la toma de decisiones. Desde el punto de vista de un ejercicio Comercial, llamamos Patrimonio Neto al CAPITAL SOCIAL + ò – los RESULTADOS (Ganancias o Pérdidas) de ese ejercicio.
El Patrimonio Neto es un concepto abstracto que muestra el valor de la riqueza de una persona (Física o jurídica) que surge de restar de la suma del valor de sus bienes y sus créditos (ACTIVO) el importe de sus DEUDAS y OBLIGACIONES (PASIVO). Al ser un valor abstracto, fruto de una ecuación, contablemente lo reflejamos inicialmente con el nombre de Capital Social, el que a través de las operaciones será transformado por los resultados positivos y negativos.
Esta es la ecuación básica de la contabilidad, la ECUACIÒN PATRIMONIAL:
Donde los ACTIVOS son los componentes mensurables en valor monetario, que el ente TIENE (bienes tangibles o intangibles) o LE DEBEN. Por otra parte decimos que los PASIVOS están compuestos por todas las deudas y obligaciones de dar, hacer o no hacer, que tiene la persona y que pueda ser mensurable en valor monetario, o sea TODO LO QUE DEBE. Ellos contribuyen pasivamente al logro de los fines del ente, de allì su nombre.
Para sintetizar esta fórmula podemos decir que:
ACTIVO ES: TODO lo QUE TENEMOS o NOS DEBEN
PASIVO ES: TODO lo QUE DEBEMOS
PATRIMONIO NETO = ACTIVO – PASIVO
Dada esta fórmula, podemos afirmar que podemos graficar la ecuación como un rectángulo que exactamente dividido al centro, la mitad (izquierda) será el Activo y la mitad (derecha) se conformará con la suma del Pasivo y del Patrimonio Neto,
donde ante una variación del activo y del pasivo de la misma magnitud (pero contraria), el Patrimonio neto se mantendrá igual: Tenemos dinero en efectivo por $ 100 (“caja”), una deuda por compras de mercaderías (“Proveedores”) de $ 20 lo que nos da un patrimonio neto de $ 80. Pagamos en efectivo parte de la deuda que teníamos con el proveedor por $ 10-
Si suponemos un momento 2, donde se produce una perdida, por el pago de un alquiler en efectivo, disminuirá el activo por el uso del dinero y afectará a nuestro patrimonio neto en igual medida:
Como ya hemos visto, el Patrimonio Neto se define como una ecuación de restar al Activo el Pasivo del Ente, pero si lo analizamos desde un punto de vista dinámico, durante un Ejercicio Comercial, el Patrimonio Neto se conforma con un conjunto de resultados (Ganancias y Pérdidas) que van modificando el Capital social. De esta forma, si partimos de un Capital Social inicial, las Ganancias van aumentando el Patrimonio (aumentando Activos o disminuyendo Pasivos) y las Perdidas lo disminuyen (achicando Activos o agrandando Pasivos) para llegar a un Patrimonio Neto al cierre que será mayor o menor dependiendo de que el resultado del Ejercicio sea Ganancia o Pérdida respectivamente.